Propósito de Marca
y Valores

assets/themes/www.morillas.com/img/services/PurposeH.jpg

El propósito de marca es nuestra razón de ser, la razón por la que nuestra organización existe, es el por qué. Es el motor en el centro de la estrategia de una organización, es lo que guía las decisiones y debe ser compartido con todos los públicos, internos y externos.

assets/themes/www.morillas.com/img/services/Purpose02.jpg

¿Por qué lo

necesitamos?

Los consumidores ya no compran lo que una marca hace, sino el por qué lo hace. Los consumidores actuales y futuros generan vínculos más estrechos y mutuamente beneficiosos con marcas que tienen claro la razón por la que fueron creadas. Este propósito debe aspirar a generar un impacto ambicioso y positivo en el mundo.

Es por ello que las marcas necesitan realizar una reflexión estratégica sobre este asunto, para así poder definir un propósito que resulte relevante y valioso para su público objetivo. No solo basta con definirlo y comunicarlo, sino que todo lo que la marca haga y diga debe resultar coherente con este principio, y no contradecirlo. Por tanto, cuando se define esta razón de ser, también se están defendiendo y comulgando con una serie de creencias y valores determinados. Acotar estos valores y también desechar los que no se es, ayuda a entender de manera más global la razón por la que una marca existe y los consumidores deben comprarla.

¿En qué
consiste?

1 Interna

El propósito de marca consiste básicamente en realizar un trabajo de reflexión interna y externa de la marca.

Los brand strategists realizan una auditoría sobre los públicos principales de la marca, los valores que transmiten sus productos o servicios, la opinión de los propios trabajadores de la empresa y todo aquello que permita sustentar en el presente o futuro de esa marca, un propósito definido.

2 Externa

Se analiza el contexto social en el que se encuentra determinada marca; se investigan los valores más demandados, las problemáticas sociales, las necesidades no cubiertas que la marca podría suplir, etc.

Una vez se ponen en común ambas reflexiones acerca de los valores y creencias de la marca, se debe definir el propósito. Es importante tener en cuenta que no se debe escoger el propósito que se crea más rentable, sino en el que más se cree y en el que la marca realmente pueda actuar con mayor impacto, porque se trata de incorporarlo de manera auténtica y honesta en el ADN de una marca.

FAQS

¿Cómo escribes un propósito de marca?

El propósito de marca debe ser entendible y extensible a todos los públicos. Si ya se ha desarrollado una plataforma de marca con anterioridad, léela y trata de asimilar la marca y los valores en los que cree. Si no se ha hecho, trata de conocer la marca y su entorno lo máximo que puedas.

Una vez creas que tienes una idea concreta de lo que es y lo que defiende, siéntate, relájate y escribe todo lo que se te ocurra. Al final siempre te enamorará alguna frase inspiradora que engloba todo lo que esa marca quiere comunicar.
¿Cómo se entrega un propósito?

El propósito de marca es un principio que la marca debe transmitir en todos y cada uno de los puntos de contacto con sus audiencias, porque todo ello construirá su imagen de marca.
Si, por ejemplo, el propósito de una marca tuviera que ver con el medio ambiente y para una pequeña acción de promoción entrega comunicaciones o merchandising de plástico, todo lo que defendía su propósito tiene ya nula credibilidad.
¿Cómo se diseña un propósito de marca?

Escoger un objetivo de cambio social que defender debe estar siempre alineado con la propuesta de marca y las actividades que realiza. Es por ello que cuando se define el propósito, éste debe de estar perfectamente razonado y justificado, el público objetivo debe entenderlo como una evolución lógica y comprensible respecto a lo que ha sido esa marca.
Tomar partido en un conflicto social requiere de verdadera determinación y acción real, por lo que se debe realizar una calendarización a largo plazo de objetivos a alcanzar y esta ha de ser comunicada a los públicos de interés. Con pequeñas o grandes acciones que sumen en dirección a estos objetivos propuestos, el consumidor percibirá una voluntad transformadora de la marca, y muy probablemente se sume al cambio.