Innovación de
Producto y Servicio
Hablamos de innovación en productos y servicios cuando, tras analizar el contexto, el mercado, el público objetivo y el concepto que se quiere transmitir como marca, damos soluciones creativas interviniendo en las características, funcionamiento y componentes intangibles de productos y servicios. Potenciando el valor añadido de la oferta frente a la competencia y las nuevas exigencias de los clientes.
¿Por qué la
necesitamos?
La cultura de hoy basada en tecnología, velocidad, originalidad y responsabilidad social, hace que la innovación sea imprescindible en cada empresa. La fidelidad de los clientes ya no solo está ligada a una marca que los representa, sino también a los productos que sean capaces de abrir nuevas oportunidades y generar experiencias únicas. De esta manera se aumenta la participación del mercado y la competitividad de la empresa elevando su valor.
¿En qué
consiste?
1
Establecer bases
A veces el objetivo es crear algo desde cero y los límites son pocos para innovar en algo disruptivo, pero normalmente hay toda una base de producto y servicio de la que hay que partir antes de intervenir. Por eso se debe hacer un estudio previo y conocer bien cada aspecto de lo que se ofrece: sus características, su funcionamiento, el proceso que hay detrás, su funcionalidad y cómo impacta este en el consumidor final.
2
Inspiración
La búsqueda de referentes es una parte esencial de este proceso. Se debe conocer lo que ya está hecho y funcionando en el mercado; mirar a la competencia, pero también a otras industrias; indagar en nuevas tecnologías y estar al día de las tendencias y las nuevas exigencias de los consumidores. Mantener una actitud curiosa y la mente abierta a nuevas opciones, listos para tomar riesgos, nos hará subir a la ola de la innovación.
3
Metodología de innovación
La innovación se suele asociar con creatividad, azar e inspiración del momento, pero para que realmente funcione y tenga un impacto positivo hay que pasar por un proceso metodológico. Por eso usamos técnicas como el Design Thinking para la generación de nuevos conceptos, el Lean Startup para validar clientes o la metodología Agile para implementar las ideas de la manera más eficiente posible.
4
Desarrollo
El camino de la innovación es un camino incierto, y una vez que el proceso empieza, no sabemos dónde puede terminar. Pero una vez definida la idea y el concepto que cambiará el producto, buscamos los recursos y medios para llevarlo a cabo, damos diferentes soluciones dentro de las posibilidades, testeamos y pivotamos dependiendo de los resultados, optimizando así la parte final del proceso de innovación.
FAQS
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¿Cuándo es necesario innovar en el producto o servicio?
El proceso de innovación de una empresa no debería terminar nunca. En la actualidad, los mercados son muy agresivos y cada día se generan nuevos negocios con propuestas diferenciadoras, por lo que un producto no se puede quedar estancado. La innovación debe ir en paralelo con la creciente necesidad de tecnología, exigencias socioculturales y originalidad de propuestas para los consumidores.
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¿Qué empresas necesitan innovación en el producto?
Todas las empresas pueden innovar de alguna manera en su propuesta de valor, ya que ésta no sólo se puede dar en el propio producto, sino en todo lo que lo rodea, ya sea en la distribución, el packaging, su impacto socioambiental, su identidad de marca, los servicios asociados a él o en la realización de sinergias con otros productos. Cualquier empresa puede y debe encontrar la manera de hacer su oferta más atractiva para superar los futuros retos del mercado.
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¿De qué se trata el Design Thinking?
Hablamos de Design Thinking como método para generar ideas innovadoras a partir del entendimiento y la solución de necesidades reales de los consumidores. Es un proceso iterativo en el cual se avanza tanto como se retrocede repetidas veces hasta dar con la respuesta acertada a las exigencias de los usuarios. Empieza con una fase de empatía y entendimiento, definición, ideación, desarrollo de prototipos y una última fase de testeo.
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¿Qué es la metodología Agile?
Seguir una metodología Agile es construir formas de trabajo adaptándolas a las condiciones del proyecto, proporcionando así flexibilidad e inmediatez de respuesta a las circunstancias específicas del entorno. Aquí los requisitos y soluciones evolucionan con el tiempo y no dejan lugar a una planificación estática. El equipo se organiza de manera flexible, multidisciplinar y autoorganizada en un proceso de toma de decisiones compartido que incrementa la eficacia y productividad de la innovación.
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